jueves, 13 de agosto de 2015

Echando una mano

Hola amiguitos, perdonad que os tenga un poco abandonados, pero irse de vacaciones es lo que tiene. Asentado de nuevo en Salamanca voy a aprovechar esta fecha, Día Internacional de los Zurdos, para hablaros de mi destreza manual.

Vaya por delante que no soy zurdo, tampoco diestro, utilizo ambas manos para mi día a día y todavía tienen que pasar un par de años para que termine de definirme. Lo que me cuesta entender es que haya adultos que vean con malos ojos que utilice la mano izquierda para comer, por ejemplo. ¡Que estamos en el 2015!

Aquí estoy comiendo unas lentejas con la mano izquierda


“¿Pero cómo le dejas agarrar la cuchara con esa mano? El niño agarra mal el tenedor. Se hace con la otra mano”, estos son tres ejemplos de frases que he escuchado recientemente emitidas por las mismas personas que insistían en los besos (anterior post). Menos mal que mi padre, al que le ocurrió lo mismo de pequeño, sale en mi defensa y me deja hacer las cosas con la mano que me apetece.


Digo yo que lo importante es hacer bien las cosas sea con la derecha o con la izquierda, ¿no? Y si aprendo a hacerlas con ambas, mejor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario